sábado, abril 29, 2006

Comienzos de novela (juego)

Hay libros cuyas primeras palabras son casi mágicas, y te enganchan desde la primera línea. Ahí van algunos de mis comienzos favoritos (seguro que vuestros también). Pero juguemos un poco, que si no es aburrido...: los copio y tratáis de adivinarlos, ¿vale?. Al final del post pondré las soluciones. Son todos bastante fáciles. Grandes clásicos; muy conocidos; creo que no hay títulos rebuscados. ¡Venga, juguemos! (ojo: no todos son novelas, hay algún cuento, teatro...):

comienzoA: La heroica ciudad dormía la siesta. El viento Sur, caliente y perezoso, empujaba las nubes blanquecinas...

comienzoB: Hipogrifo violento,/ que corriste parejas con el viento...

comienzoC: Llamadme Ismael. Hace unos años - no importa cuánto hace exactamente - teniendo poco o ningún dinero en el bolsillo, y nada en particular que me interesara en tierra, pensé que me iría a navegar un poco por ahí, para ver la parte acuática del mundo.

comienzoD: ¡Ay de mí! Con laborioso ardor he estudiado la filosofía, la jurisprudencia, la medicina, y también la teología, e, ¡insensato de mí!, al presente soy tan ignorante como si nada hubiese aprendido.

comienzoE: Nadie hubiera creído , en los últimos años del siglo XIX, que los asuntos humanos fueran vigilados de forma tan atenta y detallada por inteligencias tan superiores a las del hombre y, sin embargo, tan mortales como la suya.

comienzoF: El Squire Trelawney, el doctor Livesey y los demás señores me han encargado de poner por escrito todo lo referente a...

comienzoG: Todas las familias dichosas se parecen, y las desgraciadas, lo son cada una a su manera. En el hogar de los Oblonski se había roto la armonía.

comiengoH: Un domingo, el 24 de mayo de 1863, mi tío, el profesor Lidenbrock, volvió precipitadamente a su casa, sita en el número 19 de Königstrasse, una de las calles más antiguas del viejo barrio de Hamburgo.

comienzoI: ¡Eran tres, siempre los tres!: Rosa, Pinín, y la Cordera.

comienzoJ: Aquel primer lunes del mes de abril de 1625 se vio la aldea de Meung, lugar donde naciera el autor de Roman de la Rose, tan profundamente conmocionada, como si los hugonotes quisieran convertirla en una segunda Rochela.

comienzoK: No era el más honesto ni el más piadoso, pero era un hombre valiente.

comienzoL: Yo, señor, soy de Segovia; mi padre se llamó Clemente Pablo, natural del mismo pueblo - Dios le tenga en el cielo -

comienzoM: Era el mejor de los tiempos y el peor; la edad de la sabiduría y la de la tontería; la época de la fe y la época de la incredulidad; la estación de la luz la de las tinieblas; era la primavera de la esperanza y el invierno de la desesperación.

comienzoN: Era más de medianoche/ antiguas historias cuentan,/ cuando en sueño y en silencio/ lóbrega envuelta la tierra,/ los vivos muertos parecen,/ los muertos la tumba dejan.

comienzoO: ¡Es cierto! Siempre he sido nervioso, muy nervioso, terriblemente nervioso. ¿Pero por qué afirman ustedes que estoy loco? La enfermedad había agudizado mis sentidos, en vez de destruirlos o embotarlos.

comienzoP: (prólogo) Yo por bien tengo que cosas tan señaladas y por ventura nunca oídas ni vistas vengan a noticias de muchos y no se entierren en la sepultura del olvido, pues podría ser que alguno que las lea halle algo que le agrade, y a los que no ahondaren tanto los deleite. y a este propósito dice Plinio, que no hay libro, por malo que sea, que no tenga alguna cosa buena.

comienzoQ: - Atad los perros, haced señal con las trompas para que se reúnan los cazadores y demos la vuelta a la ciudad. La noche se acerca, es el día de Todos los Santos y estamos en el Monte...

comienzoR: Míster Utterson, el abogado, era un hombre de adusto semblante, jamás iluminado por la alegría una sonrisa; frío, parco y embarazado de discurso; tardo en la emoción; enjuto, largo, seco y melancólico y, sin embargo, despertaba afecto.

SOLUCIONES:

A: esa ciudad es Vetusta, y la novela, La Regenta (Barcelona, 1884), de Leopoldo Alas "Clarín" (1852-1901)
B: ¿dónde, rayo sin llama... es el monólogo de ROSAURA al principio de La Vida es Sueño (1636), de Pedro Calderón de la Barca (1600-1681)
C: dice que se llama Ismael, pero nos habla Herman Melville(1819-1891) en su inmortal Moby Dick o La Ballena Blanca (1851)
D: ese que se lamenta del tiempo perdido en especulaciones es Fausto en su parte primera (1808) de Johann Wolfgang von Goethe (1749-1832).
E: sí... ¿quién iba a pensar, eh Herbert George Wells(1866-1946), que nos invadirían los marcianos y habría una Guerra de los Mundos (1898)?
F: una de mis favoritas. Todo lo referente a... La Isla del Tesoro (1883) de Robert Louis Balfour Stevenson (1850-1894)
G: Ana Karenina o Retrato de Dos Matrimonios (1877), de León Tolstoi (1828-1910).
H: El que habla es Axel, el sobrino de ese alocado profesor Lidenbrock. Van a realizar, de la mano de Julio Verne (1828-1905) un Viaje al Centro de la Tierra (1864).
I: El cuento más famoso del siglo XIX español: Adiós Cordera (incluido en el libro El Señor y Lo Demás Son Cuentos (1893), de "Clarín".
J: Los Tres Mosqueteros (1844) de Alejandro Dumas (1802-1870). Ese primer Lunes del mes de abril de 1625 fue día 4, según leemos en EL CLUB DUMAS de Pérez Reverte, y según hemos comprobado ;)
K: Las Aventuras del Capitan Alatriste (1996), de nuestro escritor vivo más leído, A. Pérez-Reverte. (por cierto, ¡qué divertidos suelen ser los libros que se titulan Las Aventuras de... (Arturo Gordon Pym, Tom Sawyer, David Balfour, Capitán Alatriste...!, incluiría también el Persiles y Segismunda, porque los "trabajos" del título, son "desventuras", que no son más aventuras en negativo...)
L: así principia El Buscón (circa 1603, impresa en 1626) de Quevedo (1580-1645)
M: Historia de Dos Ciudades (1859) de Charles Dickens (1812-1870)
N: adoro a Espronceda (1808-1842) y su Félix de Montemar, El Estudiante de Salamanca (incluído en Poesías de don José de Espronceda, de 1840). La mejor obra del romanticismo español según el poeta Jaime Gil de Biedma.
O: ese es el comienzo de uno de mis cuentos favoritos de Edgar Allan Poe (1809-1849), concretamente de El Corazón Delator (1843)
P: Habla El Lazarillo de Tormes (1554). El primer ejemplo de novela picaresca, género genuinamente español ( jaja, está claro que no podía nacer en otra parte...) que luego sería utilizado en otros países. Su autor es desconocido.
Q: Tenía que incluir un cuento de Bécquer (1836-1870). Así que escogí uno de sus más famosos, El Monte de las Ánimas (1861). Este lugar existe y está en Soria.. si algún día pasáis por allí, haced lo que os dice esa genial canción de Gabinete: "Cuando divises el Monte/ de las Ánimas,/ no lo mires, sobreponte/ y empieza el caminar."
R: Ese míster Utterson descubrirá algo terrible que afecta a un médico amigo suyo y a un malvado personaje misteriosamente relacionado con él en El Extraño Caso del Doctor Jeckyll y Míster Hyde (1886) del siempre grande Stevenson.

NOTAS: -imagen1, fotograma de la película de John Huston(1906-1987) Moby Dick (1956), la mejor adaptación hasta la fecha de la novela de Melville, con Gregory Peck en el papel del capitán Achab.
-imagen2: Ahí están Rosa, Pinín y la Cordera en una estatua en Oviedo cerca del parque San Francisco.
-imagen3: reciente edición italiana de El Estudiante de Salamanca ("Lo Estudente di Salamanca"), con un retrato en la portada del maestro Espronceda.
-imagen4: una fotografía muy bonita de un escribiente Stevenson.

Sed felices :) os deseo lo mejor.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola!!!

Me encanta este post!!!

Pues yo he adivinado; La Regenta, La vida es sueño, La isla del tesoro, Alatriste, el título de el corazón delator no, pero sí sabía que era de Poe ; ) El monte de las ánimas…. Qué más que más….ah! El Extraño Caso del Doctor Jeckyll y Mr Hyde …El lazarillo de Tormes. .


Bueno ahí van otros comienzos a ver si los acertáis;


A. Dos caras, como algunas personas, tiene la parroquia de San Sebastián… mejor será decir la iglesa… dos caras que seguramente son más graciosas que bonitas: con la una mira a los barrios bajos, enfilándolos por la calle de Cañizares; con la otra al señorío mercantil de la Plaza del Ángel.

B. No espero ni pido que nadie crea el extravagante pero sencillo relato que me dispongo a escribir. Loco estaría, de veras, si lo esperase, cuando mis sentidos rechazan su propia evidencia. Sin embargo, no estoy loco, y ciertamente no sueño.

C. Gran persona debió de ser el primero que llamó pecado mortal a la pereza; nosotros; que ya en uno de nuestros artículos anteriores estuvimos más serios de lo que nunca nos habíamos propuesto, no entraremos ahora en largas y profundas investigaciones acerca de la historia de este pecado, por más que conozcamos que hay pecados que pican en historia, y que la historia de los pecados sería un tanto cuanto divertida.

D. Un edificio gris, achaparrado, de sólo treinta y cuatro plantas. Encima de la entrada principal las palabras: Centro de incubación y acondicionamiento de la central de Londres, y, en un escudo, la divisa del Estado Mundial: Comunidad, Identidad, Estabilidad.

E. El año 1866 se distinguió por un acontecimiento extraño, un fenómeno inexplicado e inexplicable, que, sin duda, nadie ha olvidado. Sin hablar de los rumores que corrían por entre las poblaciones de los puertos y sobreexcitaban el espíritu público en el interior de los continentes, se preocuparon de este hecho en grado superlativo.

F. El desconocido llegó a pie desde la estación de ferrocarril de Bramblehust cierto día invernal a primeros de febrero, abriéndose paso a través de un viento cortante y de espesos copos de nieve. Era la última nevada del año.

G. ¡Qué hermoso día! He pasado toda la mañana tendido sobre la hierba, delante de mi casa, bajo el enorme plátano que la cubre, la resguarda y le da sombra. Adoro esta región, y me gusta vivir aquí porque he echado raíces aquí, esas raíces profundas y delicadas que unen al hombre con la tierra donde nacieron y murieron sus abuelos, esas raíces que lo unen a lo que se piensa y a lo que se come, a las costumbres como a los alimentos, a los modismos regionales, a la forma de hablar de sus habitantes, a los perfumes de la tierra, de las aldeas y del aire mismo.

Bueno, ya me he cansado de escribir comienzos, así es que hala, venga, cuáles habéis descubierto? Algunos son muy facilitos y otros quizás cueste adivinarlos sólo con el comienzo ; )

Estas son las respuestas:

A.Misericordia de Benito Pérez Galdós.
B.El gato negro de Edgar Allan Poe.
C.Vuelva usted mañana de Mariano José de Larra.
D.Un mundo feliz de Aldoux Huxley.
E.Veinte mil leguas de viaje submarino. De Julio Verne.
F.El hombre invisible de H.G. Wells.
G.El Horla de Guy de Maupassant

Un saludo, felicidades por tu blog, siempre aprendo cosas nuevas.

ciao, nos vemos. : )

M. Imbelecio Delatorre dijo...

hola, evavera!

muchas muchas gracias por ese comentario tuyo (¡se lleva el premio al comentario más divertido del año!), porque gracias a él pude jugar yo también, y podrán jugar cuantos nos visiten a partir de ahora :)

yo te las adiviné todas salvo Misericordia de Galdós y salvo el artículo de Larra (aunque debí suponer que era él!!)

Si es que tenemos gustos parecidos ;)

besazo, y gracias por adornar y enriquecer el blog con tus inteligentes razones :)

Pd.- ayer mientras escribías a las dos y treinta y cinco el inicio de El Gato Negro de Poe, yo estaba intentando conciliar el sueño escuchando, en audiolibro, ése mismo relato. :O

Anónimo dijo...

Genial!!!! Has sacado un notable alto !! ejeeje

¿Intentado conciliar el sueño escuchando el gato negro? Es casi imposible con ese pedazo relato. Aun tengo en mis oidos esa voz chillona ¡el gato negro, el gato negro!

saludos!!!

Anónimo dijo...

"Anoche soñé que había vuelto a Manderley."

Para mí el mejor comienzo de novela, además una de mis favoritas. No he leído ninguna otra primera frase que me haya enganchado tanto...

M. Imbelecio Delatorre dijo...

Hola!

muuuchas gracias por tu comentario.

Daphne du Maurier :) novelista muy famosa gracias al cine. me encanta esa película :) saludos.

Manderly dijo...

A - '...
Ésta era la inscripción que había en la puerta de cristal de una tiendecita, pero naturalmente sólo se veía así cuando se miraba a la calle, através del cristal, desde el interior en penumbra'



B - 'Scarlett O'Hara no era bella, pero lo hombres no solían darse cuenta de ello hasta que se sentían ya cautivos de su embrujo, como les sucedía a los gemelos Tarleton.'


(Y aunque no es novela, ¡me encanta!)
C - '¡Cuál gritan esos malditos!
¡Pero mal rayo me parta
si, en concluyendo esta carta,
no pagan caros sus gritos'



Por aportar y visitar este post... :-P

Saludos.

A - 'La historia interminable' de Michael Ende.
b - 'Lo que el viento se llevó' de Margaret Michell
C - 'Don Juan Tenorio' de José Zorrilla.

M. Imbelecio Delatorre dijo...

hola, manderly!

muuuchas gracias por aportar esos comienzos chulis y hacernos seguir jugando. Que sepas que falle el primero (vi al peli cuando era el niño, pero el libro no lo leí), pero acerté los dos últimos (eso que LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ no lo leí, pero es inconfundible ;) )

:) beso

Anónimo dijo...

Hola :)
He leído el cuento de "Adiós Cordera". Qué cuento tan entrañable a pesar de su tristeza, y qué gracioso trío el de la vaca y los dos pastorcillos.
Me acordé que le hacías referencia en este post, por eso te lo cuento por aquí.
Besazooo
ya reconoceré siempre ese principio ;)