Luz de poemas de palabras
que nadie más ha escuchado
sino yo, y mi dicha labras
con tenerte aquí a mi lado,
¡qué extraño presentimiento,
qué temor (quizá infundado)
conturba mi pensamiento
y hiere mi ánimo turbado!:
hame dado por pensar
que a mi lado no te tengo,
que todo es falaz soñar
y pronto estaré despierto,
que el dulce sentir no es real,
ni tus ojos, ni tus besos...;
que pronto no existirás
ni yo ya recordaré esto…
que nadie más ha escuchado
sino yo, y mi dicha labras
con tenerte aquí a mi lado,
¡qué extraño presentimiento,
qué temor (quizá infundado)
conturba mi pensamiento
y hiere mi ánimo turbado!:
hame dado por pensar
que a mi lado no te tengo,
que todo es falaz soñar
y pronto estaré despierto,
que el dulce sentir no es real,
ni tus ojos, ni tus besos...;
que pronto no existirás
ni yo ya recordaré esto…
¡Abrázame fuerte! ¡más!
¡cuanto temía era cierto!;
y la vida que me das
¡cuanto temía era cierto!;
y la vida que me das
con tu piel y tus cabellos,
con tu ternura y bondad,
con tu ternura y bondad,
con tus ojos y tus besos,
ya presta a acabar está,
ya se muere con el sueño.
ya presta a acabar está,
ya se muere con el sueño.